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Pérez deslizó la posibilidad de que el director general de Integración y Desarrollo Social, Carlos López, no renuncie a su cargo, como transcendió durante Semana de Turismo. “Todavía tenemos alguna esperanza de que reconsidere”, comentó el legislador, aunque por otra parte admitió que ya maneja alternativas para sustituirlo.

El legislador reconoció que López dirige un área que desgasta, angustia y estresa debido a las situaciones complejas que se registran en esa repartición, generalmente, por la cantidad de personas que se acercan a pedir una vivienda en situaciones extremas. “Eso genera gran nerviosismo”, comentó.

Afirmó que tanto López como su antecesora Lucía Dotti (designada en representación de Cabildo) fueron “más allá del deber” y estuvieron “full time” para resolver situaciones y luchar contra la burocracia, contra las “10.000 demoras que se dan para cumplir con la normativa”.

La incesante llegada de uruguayos de otros departamentos en busca de empleo a Maldonado es la raíz de esa problemática y sólo puede revertirse con oportunidades laborales en otras partes del país, consideró Pérez.

Entretanto, entiende que Maldonado debe diversificar sus fuentes laborales, tradicionalmente ligadas al turismo y a la industria de la construcción. Ambos rubros “son sensibles a los vaivenes de la economía mundial y eso genera una gran ansiedad”, observó.

SUBVENCIÓN PRIVADA

El futuro Centro de Convenciones y Predio Ferial de Punta del Este es una vía para lograrlo porque generaría “un turismo más estable, regulable y predecible” porque los eventos se organizan con varios años de antelación.

Pérez reafirmó la intención del Frente Amplio de ejecutar este proyecto y “subvencionarlo si es necesario, pero que todos los que se favorecen pongan algo”. A su juicio, “esto tendría que tener más o menos el mismo esquema” que la decisión del presidente de la República, José Mujica, de crear un impuesto para que los beneficiarios de la explotación forestal contribuyan al mantenimiento de los caminos y carreteras por las que sacan su producción.

AÑO DE ALIANZAS

Pérez también ratificó su intención de postularse por quinta vez a la intendencia de Maldonado y reafirmó su convicción de que la Liga Federal Frenteamplista (surgida en el interior del país) continúe creciendo.

En ese sentido, adelantó que mantuvo reuniones y “conversaciones bilaterales” con dirigentes de la lista 711 (de Raúl Sendic), con el Frente Líber Seregni y con “algún referente” del Partido Socialista. También prevé reunirse con integrantes del Partido Comunista en Montevideo.

Pérez remarcó que el FA tiene que seguir en el gobierno para “mantener lo bueno y corregir lo que no se ha hecho bien”. A modo de ejemplo, dijo que en lugar de Mujica él hubiera removido a los miembros del Consejo de Educación antes del año y medio de gestión, por su incapacidad para ejecutar el presupuesto asignado.

DISPUTAS DE PODER

También reclamó “libertad” de expresión dentro de la coalición de izquierda donde, a su juicio, los sectores más grandes impiden a los más pequeños manifestar sus discrepancias con la conducción. Eso limita las posibilidades de expansión de las agrupaciones minoritarias, consideró.

“En el FA cuesta la autocrítica. Cuando alguien pretende autocriticar te miran de cotelete. Es una práctica del Partido Colorado inscripta en el FA. (…) Tenemos que discutir las cosas libremente, para que la gente vea. Así defendemos al FA y le podemos pedir al frenteamplista que elija al que siga el camino o más correcto pero eso es posible si la gente se entera de dónde están las diferencias.”

“En aras de la unidad mandan a todos a callarse. Estamos aburridos de ver teatro en el que los grandes se afilan para un lado y otro y los chicos miramos como el gato para la fiambrera. Hay que tener en cuenta a todos los actores del FA aun siendo pequeños. Somos una manada y tenemos que ir juntos”, enfatizó.

En su opinión, esta es una de las razones por las que la Liga Federal Frenteamplista tiene poca prensa. “Ni de canto nos van a dar oportunidad de manifestar lo que somos ni lo que queremos hacer. Ni en la prensa de derecha, salvo que metamos lío adentro, ni en la de izquierda”, remarcó, particularmente molesto con el diario La República.

“Sabemos que molestamos porque estamos disputando una porción de poder al centralismo. Y el centralismo no quiere que en el interior aparezca quien le pueda hacer sombra. (…) Nos podíamos haber prendido a alguno de los grandes, pero preferimos ser cabeza de ratón antes que cola de león.”
mr