Agó y Beba Páez realizan este martes un homenaje a su padre, Carlos Páez Vilaró, con un Encuentro Popular en la Punta de la Ballena. Al detallar las actividades, Agó contó a FM Gente cuán difícil es defender el legado del artista, fallecido hace un año, en medio de sucesiones y discrepancias familiares respecto al destino de sus propiedades y colecciones. “Siento la responsabilidad enorme de continuar con el camino del arte, del candombe y la negritud, y seguir con su bandera hasta que sea mi momento de partir”, afirmó.
A partir de las 19:00 de este martes habrá un encuentro popular en la Punta de la Ballena, a donde se convoca a los niños para pintar un sol en homenaje al artista y luego se sumarán los grandes para una obra colectiva. La caída de sol comenzará a las 20:35, momento en que se iniciará la Ceremonia del Sol, escrita por Páez Vilaró y sonarán en Casapueblo los tambores tan apreciados por el artista.
“El homenaje es festejar la vida porque vivió 90 años maravillosamente bien, haciendo lo que quería. Es recordarlo con alegría y con el sol brillante que hoy nos espera”, comentó Agó en FM Gente, quien por otra parte confesó lo difíciles que han sido estos meses sin el artista.
“Era quien ordenaba, imaginaba, programa y creaba todo. Ahora somos seis hijos y una viuda, que tenemos que estar de acuerdo, con lo difícil que es coordinar. Pero nuestro norte es continuar con la obra de papá, en mi caso más allá de lo material”, aseguró Agó. “Es algo espiritual, el legado artístico que recibí de él desde que recuerdo. Se trata de continuar con el arte, los tambores, el carnaval y lo voy a seguir a muerte más allá de todas las dificultades que tengamos que atravesar de una sucesión que es terrenal y complicada. Siento la responsabilidad enorme de continuar con el camino del arte, del candombe y la negritud y seguir con su bandera hasta que sea mi momento de partir”, reafirmó.
Agó confirmó que se mantiene la causa abierta en Argentina por la desaparición de 111 obras de Páez Vilaró de su atelier en Tigre. Después que se radicó la denuncia aparecieron casi la mitad de los cuadros, que estaban guardados en depósitos y apartamentos. Sin embargo, se desconoce qué pasó con el resto. “Siguen investigando y no sabemos a dónde fueron a parar. En Argentina se intenta que las obras se mantengan dentro del país. Paralelamente, debimos abrir una sucesión en Argentina que se encuentra demorada debido a esta situación. Transitamos un momento de extrañarlo a él pero sobre todo hay que ajustar muchas cosas que él tenía en sus diferentes propiedades y sus colecciones”, comentó.
No supo estimar a cuánto asciende el valor de los cuadros desaparecidos, ya que las piezas van desde los 5.000 hasta los 120.000 dólares, dependiendo de su tamaño, época y año de creación.
(foto: nuestromar.org)