El arquitecto Julio Riella, director general de Planeamiento Urbano y Ordenamiento Territorial, dijo en FM Gente que hay inversores interesados en expandir la ciudad hacia el Norte. En ese sentido, indicó que la Intendencia buscará mecanismos para establecer cuál es la mejor zona de desarrollo. El jerarca también habló de un cambio en la conducta de los pobladores costeros de José Ignacio y del posible crecimiento de Garzón.
Riella consideró que el natural crecimiento de la capital departamental sería hacia el Norte, zona en la que además existen empresarios interesados en invertir y dispone de una amplia disponibilidad de servicios, como energía eléctrica, agua, saneamiento infraestructura vial y transporte, entre otros factores.
“Visualizamos que en la medida que haya algún tipo de facilidades, hay empresas interesadas en desarrollar complejos habitacionales para población permanente. Especialmente para la zona norte de Maldonado, que hay muchos huecos y tiene muchos servicios. Hay espacios y ameritaría o sería interesante que se afincara población”, observó el jerarca.
Agregó que se está trabajando en un borrador, que tiene “todas las características de proyecto de modificación de normativas”, además de otro estudio de modificación para la zona de Maldonado Nuevo, más un tercero que apunta a fomentar asentamientos edilicios en las avenidas importantes de la ciudad.
También dijo que en la zona costera del este del departamento se están registrando algunos “fenómenos”, vinculados sobre todo a emprendimiento agroindustriales cercanos a Garzón. A juicio de Riella, no sería descabellado que muchos de los habitantes que en las últimas décadas dejaron el pueblo puedan regresar atraídos por nuevas fuentes laborales, entre otros motivos.
“Hay un desarrollo a tener en cuenta en cuanto a los planes locales y parciales que son necesarios para todas las zonas urbanas y sus entornos, que es el entorno de Garzón. Allí puede empezar a revertirse aquella migración de población que fue hacia la costa por la actividad turística y la construcción”, consideró.
En opinión de Riella, en Garzón puede “empezar a darse un fenómeno de radicación de población inverso, en función de cosas que ocurrieron, sea desde el punto de vista de la producción agroindustrial y a su vez la producción turística rural”. Agregó que ya hay propuestas de ampliar la planta urbana, lo cual marca un creciente interés de personas que planean residir en ese lugar.