Facebook Twitter WhatsApp

Este lunes, a diferencia de los dos días anteriores, el parte médico oficial sobre la salud de Juan Izquierdo llegó más tarde que las novedades. Es que el futbolista de Nacional de Uruguay que se desplomó durante un partido de Copa Libertadores por un paro cardíaco en pleno campo de juego permanece internado en San Pablo, Brasil, mientras el mundo del fútbol sigue consternado por la situación.

Fue la cónsul uruguaya Marta Echarte, que estuvo en el hospital israelita Albert Einstein la que brindó un preocupante escenario: “Hemos estado desde la mañana temprano con (Alejandro) Balbi, el presidente de Nacional y con la familia, la esposa y los padres de Juan y también con los médicos. La situación es muy delicada, prácticamente irreversible y bueno, se está esperando qué va a pasar en las próximas 48 horas”, señaló.

"No es para nada alentadora, y bueno, el consulado está pronto y dispuesto como corresponde para actuar si el desenlace se produce", agregó en una sorpresiva declaración, ya que no existieron partes médicos que hablaran sobre un empeoramiento del cuadro clínico, más allá que permanece con asistencia respiratoria e intubado en terapia intensiva.

Y continuó: "Los daños cerebrales son lo que más preocupan ahora. Hablamos con los médicos y al principio fue un tema cardíaco, una arritmia cardíaca, pero después se complicó y hubo una progresión y compromiso cerebral, es lo que dice el parte médico. Y en este momento le están dando una asistencia respiratoria".

Mientras tanto, el fútbol uruguayo está suspendido por la salud de Izquierdo. Todos unidos rezando para que el defensor pueda salir de esta bravísima parada, aunque el cuadro es más que complicado.

Este lunes, hubo múltiples personas que se acercaron al Hospital Israelita Albert Einstein de la ciudad de San Pablo, Brasil, para acompañar a la familia de Izquierdo y a los dirigentes de Nacional. Un rato después de la cónsul Echarte, apareció Diego Lugano, ídolo de San Pablo y ex capitán de la selección de Uruguay.

Asimismo, un dato esencial que apareció este mismo lunes fue el que reveló Sebastián Bauzá, director de la Secretaría Nacional del Deporte de Uruguay, quien contó en una charla con el programa Minuto 1 de Carve Deportiva que hace diez años le habían detectado una pequeña arritmia a Izquierdo, cuando éste tenía apenas 17 años.

“En 2014, con el programa Gol al Futuro, le realizaron estudios a Juan Izquierdo. Juan tenía 17 años, estaba jugando en Cerro y tenía una pequeña arritmia, algo que fue informado”, señaló Bauzá. El programa Gol al Futuro funciona a cargo de la Secretaría Nacional del Deporte, y "promueve la formación integral de los/as futbolistas juveniles y acompaña en el crecimiento personal y profesional".

Por otra parte, los jugadores de Nacional se reunieron durante la mañana en la Ciudad Deportiva Los Céspedes, predio de entrenamiento del club, pero sin el objetivo de planificar una práctica. “Nuestro capitán (Diego Polenta) se preocupó por llevarla (a la mujer de Izquierdo) al aeropuerto, hablar con los médicos para ver si podía viajar con la bebé a San Pablo. Entonces, ¿con qué cabeza vas a practicar y podés enfrentar un entrenamiento? Es prácticamente imposible”, contó Balbi.

También se conoció que la segunda fecha del campeonato uruguayo, pactada para jugarse entre semana, volvió a ser suspendida "reflejando el sentir de todos los estamentos del fútbol respecto a la delicada situación del jugador Juan Izquierdo".







(Copyright Olé, Clarín)