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Roel sostuvo que “el que sigue funcionando y tiene una dinámica igual y en algunos casos hasta mayor que años atrás es el mercado de alta gama”, con un interés muy fuerte de inversionistas de la región, en particular de Argentina y Brasil, pero también con capitalistas de otras procedencias.

“El mercado de alta gama, como (pasa) en todos los países, no es tan susceptible a las crisis o a los problemas o coyunturas económicas que pueda haber en un país o en una región”, advirtió Roel.

Agregó que “ese es un segmento del mercado inmobiliario que se sigue moviendo en Punta del Este en forma muy adecuada, muy fluida”. “Otros segmentos están un poquito más complicados; la inercia no es la que tenían años atrás”, aseguró.

Fuentes del sector inmobiliario en Punta del Este dijeron a FM Gente que la inversión en tierras de alta gama se ha convertido en un refugio de algunos inversionistas con gran poder de compra, que procuran colocar sus activos a resguardo de las inseguridades y fluctuaciones que enfrentan los mercados globales, y de las tomas de decisiones de los gobiernos sudamericanos. Estos productos inmobiliarios superan los 15 millones de dólares en algunos casos.

Terramar tiene a la venta tres chacras cuyo valor supera el millón de dólares, integradas al denominado proyecto Las Lunas.

Dentro del proyecto las lunas, seis chacras en José Ignacio, a menos de cinco minutos de la playa, y que fueron parquisadas por el paisajista Roberto Mulieri, serán ofrecidas en remate el próximo sábado 26 de enero por Terramar.

Roel dijo que este tipo de remates pretende introducir una nueva modalidad de comercialización de los productos de alta gama que existen en Maldonado.

El remate “es una forma de dinamizar la situación del mercado; hoy en día sigue habiendo gente buscando muchas formas de productos (inmobiliarios), y se da la particularidad de que las compras ya no respetan los plazos en las que antes se concretaban”.

Z.L.