El 2017 no fue un año sencillo para Marcelo Tinelli . Los graves problemas financieros que atravesó Ideas del Sur -su ex productora, vendida al Grupo Indalo de Cristóbal López- puso al borde del abismo a su programa insignia, ShowMatch: sueldos atrasados, deudas a proveedores, recortes en el presupuesto y demás inconvenientes no hicieron más que sumar dolores de cabeza y preocupación.
Por eso, ni bien terminó el "Bailando por un sueño", el conductor decidió tomarse un respiro. Primero, viajó junto a su pareja, Guillermina Valdes, y su hijo menor, Lorenzo, rumbo a Esquel. Allí, disfrutó de la tranquilidad de los paisajes patagónicos, antes de emprender vuelo hacia Punta del Este, el destino elegido cada verano para recibir el nuevo año.
El 31 por la mañana, Tinelli arribó al Aeropuerto Internacional de Laguna del Sauce, se tomó una selfie junto a los fotógrafos que cada año lo persiguen por la costa uruguaya y luego se reencontró con el resto de su familia. En su chacra de La Boyita, rodeado de los suyos, celebró la llegada del 2018.
Las postales hablan por sí solas: relajado y siempre acompañado por Valdes y Lorenzo, el conductor descansa en la costa uruguaya mientras intenta dejar atrás el recuerdo de uno de sus años más complicados en lo profesional. Lo próximo será definir el camino a seguir para que ShowMatch regrese a la pantalla de eltrece en tiempo y forma, bajo la tutela de una productora propia.
Fuente: Tvshow
Foto: La Nación