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La sindicalista responsabilizó de lo más grave que está pasando en la prestación departamental, a las autoridades de la Administración de los Servicios de Salud del Estado, ASSE, pero también deslizó que hay “intereses” que no identificó que están favoreciendo la prestación de asistencia privada en detrimento de la pública.

“Cuando hablamos que necesitamos más enfermeras, más administrativos, más personal de laboratorio porque hasta el laboratorio se ha visto afectado por la necesidad y faltante de personal, ASSE pone a disposición 50 unidades”, dijo, utilizando “unidades” como sinónimo de personal especializado.

Agregó que el mayor problema en la necesidad de personal es la demora en seleccionarlo, “porque primero se hace un llamado, hay un tiempo de espera, después se forma un tribunal para puntear (puntuar) por méritos y antecedentes al postulante, y después de ahí recién sale una lista” de la que se selecciona.

COSAS GRUESAS EN MALDONADO

Lucero sostuvo que “la administración pública es todo un procedimiento que tampoco lo podemos obviar, porque (si no) volvemos a otras épocas cuando se digitaba (el ingreso de) la gente, y entraban porque era amigo de, o conocido de; estas cosas llevan un tiempo”.

Admitió que desde el 17 de abril, cuando realizaron la última movilización, no se ha conseguido mucho. “No ha habido un gran cambio, por el contrario, todos los días pasan cosas gruesas dentro del hospital (de Maldonado), y lamentablemente están muy involucrados los trabajadores”, afirmó.

“Acá hay que darse una discusión muy firme en cuanto a esto; qué es lo que está fallando acá, falla una cabeza, nosotros como trabajadores podemos llegar hasta cierto punto; después son decisiones de (las autoridades de) ASSE, que son las que tienen que ser tomadas” y no se adoptan, se quejó.

EL USUARIO NO ESTÁ

La sindicalista, que respondió que se había escogido el hospital de Pan de Azúcar para este encuentro de autoridades sindicales de la región y nacionales porque es donde “he trabajado durante 31 años”, y “es mi hospital”, pasó factura a la falta de apoyo de los usuarios cuando los funcionarios de la salud manifiestan.

“El usuario demanda, demanda, y demanda, pero cuando lo precisamos para que reivindique junto a nosotros por esa demanda que llama todos los días, o (habla) por la radio, o porque se expresa en otro tipo de medios, no está”, acusó.

Añadió que “ellos están pidiendo (que se eliminen) esas largas colas de espera donde a la gente le dan un día para todos los especialistas, y yo creo que no es así como debería ser: la infraestructura del hospital de Maldonado no tiene para que en un día solo puedan haber miles de personas, desde horas de la madrugada, esperando”, fundamentó, esta vez dando razón a los reclamos de los usuarios.

“Debemos buscar la manera de cómo solucionar esos temas. Nosotros somos un aporte más, no dirigimos el hospital; cuando tengamos que ponernos firmes, cuando digamos que esto no va más, ahí entraremos en otro plano”, declaró, en marcado tono de amenaza.

SAN CARLOS DISTINTO, PERO NO TANTO

Lucero emprendió una defensa de la conducción del hospital de San Carlos, pero algunas respuestas más tarde marcó cosas muy malas que están ocurriendo allí con la actual administración.

“El hospital de San Carlos tiene sus necesidades, los enfermeros no trabajan en las condiciones que deberían de trabajar, (pero) hay una diferencia con el hospital de Maldonado porque quizás la dirección del hospital de San Carlos está un poco más cerca de las necesidades de la gente, por lo menos desde los ojos con que nosotros miramos y observamos”, opinó.

Agregó que la dirección del hospital de San Carlos “busca soluciones”, lo que les impone la disyuntiva de que “entre la necesidad que pide (reclama) la dirección, la necesidad que exige el trabajador, (que) ASSE se ponga las pilas de una vez, por favor, y que San Carlos tenga lo que tenga que tener”, ordenó. “Porque San Carlos es un hospital con una población muy grande que necesita otro tipo de atención”, reforzó.

Pero, de inmediato exhibió algo que contradice su defensa de la administración de ese nosocomio. “El hospital Psiquiátrico no debería ni de existir donde está, eso tiene que ser solucionado ya, y no es esto para dentro de cinco o 10 años”, dijo.

“Es lamentable la situación de tener un hospital Psiquiátrico, lo que demandan esos pacientes de atención, (y) que se los tenga arriba, en una jaula; es la impresión que me llevo cada vez que voy; es una imagen grotesca, es algo que realmente sensibiliza a mucha gente”, arremetió.

Añadió que “mientras no se haga un nuevo local, una nueva estructura, (habría que) buscar dónde, pero habría que sacar esa gente de ahí, por favor”, exigió.

Lucero formuló una evaluación indirecta de las autoridades responsables de las situaciones que ella denuncia, porque dijo “a mi me duele mucho ver esa situación, será porque uno es más humano, más sensible”. No dijo más humana y sensible que quien o quienes.

ENCUENTRO REGIONAL

Lucero ofreció detalles del encuentro de hoy que, dijo, tiene a su cargo empezar a resolver cómo van a retomar sus manifestaciones en reclamo de todas estas cosas y otras que también mencionó en la entrevista.

Participan del encuentro en Pan de Azúcar, delegados de funcionarios de la salud de Treinta y Tres con su presidente, Mary Rodríguez, de Cerro Chato; Antonio Dutra, del hospital de Minas; de Rocha, Carlos Arres de Castillos, y Daniela Rodríguez de Chuy. Lucero encabeza la delegación de Maldonado; Carlos Torres, como secretario; el secretario general del interior, Pablo Cabrera; y el presidente departamental de Montevideo.

“Las departamentales volcaremos en la mesa (regional) las necesidades de cada hospital y cómo nos vamos a parar, no solo en movilizarnos por cada centro, sino también encarar los convenios que se acordaron a diciembre de 2012 con ASSE, y que no han sido cumplidos a la fecha”, explicó.

Agregó que “hoy, mayo de 2013, esos puntos no han sido cumplidos; estamos dándonos una discusión de cómo volvemos al conflicto, porque ya hemos esperado lo suficiente”, completó.

zl