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Después de trabajar como edil durante casi diez años en la Junta Departamental, Ruben Isidro Toledo Perlas confesó esta mañana que “algo pasó” a raíz del infarto que sufrió el 9 de mayo de 2009. Dijo que aquella operación de ocho horas a pecho abierto lo hizo “reflexionar” y ver cuáles son las cosas importantes y las que no: no quiere seguir en el fragor de las discusiones entre bancadas de la Junta Departamental ni tampoco dentro de su propia colectividad.

“No dejo la política, es imposible dejarla. No estoy dejando ni la política ni el Frente Amplio, quizás sea que soy más frentista que antes. Pero no voy a estar en esta coyuntura, ni participando ni trabajando para la Junta Departamental”, comentó. Entonces anunció que no volverá a ser edil, que no se postulará y que tomó la decisión tiempo atrás: “creo que me he cansado. Hay un antes y un después del infarto. Me metía mucho en lo que es la política, dejaba muchas cosas por el camino por la política.”

Pero la decisión de alejarse no se debe sólo a una cuestión de salud. Toledo dijo que necesita “estar motivado” para trabajar y que eso no ocurre en estos tiempos de Frente Amplio gobernante. Aseguró que su fuerza política no es la de antes. “Después que se hizo gobierno el FA cambió y hay que adaptarse a estos cambios y a algunos nos cuesta más que a otros. Para llevar adelante un montón de cosas, a veces, es una pelea constante con nuestros propios compañeros. Eso va desgastando y va cansando. A mí me ha cansado. Es lo que me lleva a descartar la posibilidad de seguir integrando los cuadros de la Junta”, indicó.

GOBIERNO DE CÚPULA

El veterano edil dijo que el antiguo Frente Amplio era “mucho más transparente y honesto”. “Hoy vemos que se juegan muchas cosas, en esto de la política y de los acuerdos políticos dentro del Frente. Por ejemplo muchas cosas que son intra-frente, que algunos nunca pensamos que se podría llevar adelante”, comentó. A modo de ejemplo, cuestionó “la honestidad de manejos que se han hecho dentro del FA de Maldonado, como el pacto por las tres presidencias a la Junta Departamental”, entre otras cosas.

A su juicio el problema es que “el FA no puede ser manejado por cúpulas y hoy se está manejando así: con caudillos y con cúpulas. Es un tema que se puede desarrollar y discutir”. Remarcó que, de todas formas, no es este punto el único que le hizo desistir de “seguir participando en la política activa”. “Hoy busco otro camino. Me siento más tranquilo de no estar en el debate permanente, en la confrontación permanente. Capaz que me cambió estar de pecho abierto ocho horas y ver las cosas de otra manera”, meditó.

LA ÚNICA OPCIÓN

Toledo dijo que recibió varias ofertas de dirigentes que intentaron llevarlo a sus tiendas y de compañeros que le pidieron que los asesore. Hará “lo que pueda, pero sin compromisos”. Afirmó que sigue “reivindicando” al FA y que no reniega de su fuerza política porque “es la opción que tiene sigue teniendo Maldonado”.

Ratificó que votará al ex intendente Óscar de los Santos, aunque no está “conforme”. “Hay muchas cosas que pasan y que uno conoce de la administración y que he estado confrontado y peleando. Por eso hay aspectos que no me dejan conformes pero espero que eso se pueda revertir. Todavía el FA es la mejor opción del departamento para seguir profundizando en los cambios”, indicó.

Admitió que ha tenido muchas diferencias con De los Santos y con su forma de gobernar. “Creo que vamos a seguir discutiéndolo, porque eso no lo voy a dejar. Donde tenga la oportunidad de discutir, voy a discutir”, advirtió. Durante la entrevista, Toledo resaltó que no es el único edil frentista que en estos meses tomó la determinación de alejarse de la vida política pública. El anterior fue Gastón Pereira.