Un banco de Punta del Este sospechó de una mujer que solicitó un préstamo por 120 mil pesos y de un hombre que insistía en ofrecer las "mejores" referencias. La mujer presentó un recibo de sueldo como gobernanta de un edificio en la península, en el que figuraba que cobraba 40 mil pesos mensuales. Lo que llamó la atención de los responsables del Banco fue la actitud de un hombre que se presentaba como el responsable del edificio.
Un sondeo de las autoridades del banco con los administradores del edificio, permitió saber que quien decía ser el encargado, era, en realidad, un guardia de seguridad del turno matutino. La mujer era la pareja de un amigo a quien le había entregado un recibo de sueldo falsificado para hacerse del préstamo, ya que ella nunca había prestado servicios en el edificio.
Inmediatamente se radicó la denuncia y el guardia de seguridad, identificado como G.M., terminó procesado con prisión por estafa en grado de tentativa con un delito de falsificación de documento privado. La mujer, de iniciales N.A.P y su pareja J.P, también fueron procesados sin prisión por el mismo delito como co autores. G.M. dijo a las autoridades policiales que intentaba ayudar a sus amigos porque estaban endeudados y no lograban salir de esa situación.
El préstamo había sido autorizado pero nunca lograron cobrarlo, ya que horas antes de ejecutarse el pago se comprobó que todo era una farsa. Según la policía el estafador tiene antecedentes penales por emitir cheques sin fondos.