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El cortejo fúnebre arribó al cementerio de Chacarita minutos después de las 13 y por expreso pedido de la familia de Leo Rosenwasser, no se realizó velorio.
La despedida del cuerpo, que ya descansa en el Panteón de Actores, contó con la presencia de su ex esposa, Raquel Bermúdez, quien acompañó a los dos hijos que tenía con el humorista y también Valeria, quien fuera la novia actual desde mediados del 2016. De todas maneras no se cruzaron.

"Vine sólo por mis hijos. De lo contrario, ni venía”, le dijo al sitio Teleshow Raquel, quien en las últimas semanas había mantenido un escandaloso enfrentamiento mediático con Rosenwasser, quien le reclamaba ante la Justicia la cuota alimentaria y las visitas a sus dos hijos , Baltazar (16) y Martina (11).

Pese a que recibió incontables saludos de varios famosos a través de las redes sociales, a la despedida del cuerpo del actor no asistió ninguno de los colegas con lo que Rosenwasser trabajó en su extensa carrera televisiva.

ASI FUERON LAS ULTIMAS HORAS DE LEO

El columnista de Crónica TV Oscar Paz, que además de una amistad compartió con Rosenwasser "NotiShow", en Radio Rivadavia, relató: "A la tarde habíamos estado juntos y habíamos hablado el día anterior. Me protestó porque no nos estábamos hablando, porque antes teníamos comunicación bastante seguido, y le dije que me había ido de viaje. ‘No me querés más’, me dijo. Y le dije que cómo no lo iba a querer, que teníamos que hablar porque teníamos un proyecto de radio importante. Quedamos en vernos antes de mi programa en Crónica, en el bar de acá al lado a la tarde, lo más bien. Estaba todo perfecto. Fue entre las 15.30 y las 16.45, hasta que le dije que tenía que subir al piso. Quedamos en vernos la semana que viene. Él estaba perfecto, nos matamos de risa e hicimos bromas con la moza".

Aún consternado por la sorpresiva muerte de Leo, de un infarto, a los 61 años, Oscar Paz siguió explicando: "A la noche yo tenía un show, y cuando estoy llegando a mi casa y por bajar los equipos, me llamó su novia por teléfono y me voy corriendo para la casa. Valeria estaba llorando y no se entendía bien, lloraba muchísimo, me dijo que tuvo un infarto. Yo le dije que ya iba para allá. Cuando llegué y vi los patrulleros, me asusté. Cuando voy a subir al ascensor, el administrador del edificio me preguntó quién era y le dije que era amigo de Leo. Entonces, me dieron el pésame y me quedé… Así me enteré, en la planta baja del edificio".

Dolorido por la muerte de su amigo, Paz dio más detalles sobre la dolorosa instancia: "Cuando subí, Valeria me contó cómo fue todo. Que lo quisieron reanimar, que habían estado lo más bien comiendo sushi, bajaron a tomar helado e hizo chistes con todos como siempre. Subieron y cuando ella quiere entrar al baño, él cae automáticamente. Lo quiso reanimar, vino una doctora del edificio y ya no pudieron reanimarlo". "A las 23,45 Leo estaba chateando con Fernando Caligari, un amigo en común por un proyecto de radio", precisó Oscar Paz.



(En base a medios argentinos)