Un hombre fue a la cárcel por "usurpación agravada", al tiempo que otros deberán cumplir arresto domiciliario por el mismo delito.
El caso comenzó con una denuncia de robo por parte de la propietaria de una casa en Playa Grande. La Policía detectó la presencia de varios extraños que, desde tiempo atrás, la ocupaban en calidad de "usurpadores".
Tras detenerlos y ponerlos a disposición judicial, Santiago García Pereira marchó a prisión por "usurpación agravada", en tanto sus dos compinches, identificados por las iniciales N.G.P. y M.DA. fueron procesados sin prisión por el mismo delito. No obstante, ambos deberán cumplir arresto domiciliario durante 60 días como medida sustitutiva.