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“Sentimos consternación”, sintetizó Silvia Zumarán, vocera del colectivo de vecinos de Garzón y José Ignacio, que anoche evaluaron los anuncios del gabinete productivo del gobierno respecto al futuro puente que unirá a Maldonado y Rocha, a través de la laguna. En diálogo con FM Gente, informó este miércoles que todos ratificaron su rechazo a cualquier propuesta que implique una “interconexión dura” entre ambos departamentos.

Sin embargo, también supieron encontrar “dos cosas positivas” a la propuesta gubernamental: que se le quite el rango nacional a la Ruta 10 para transformarla en camino departamental, y que se integre la Laguna Garzón al Sistema Nacional de Áreas Protegidas, como varias organizaciones reclaman hace tiempo.

NO AL PUENTE, SÍ A LAS BALSAS

De todas formas, Zumarán sostuvo que el colectivo vecinal –que trasciende a la Liga de Fomento de José Ignacio- continúa diciéndole no al puente y en defensa de un sistema de balsas mejorado.

“Entendemos que no hay una decisión final de la Dirección Nacional de Medioambiente al respecto, sólo hay una decisión política”, enfatizó, sin perder las esperanzas que pese a la firmeza del gobierno, haya una marcha atrás.

Los vecinos están convencidos de que este anuncio gubernamental responde a “presiones” de los empresarios interesados en la construcción del puente para desarrollar sus emprendimientos urbanísticos en la costa de Rocha. Entienden, además, que antes de aprobar semejante obra, debería incluirse a la laguna en el SNAP para hacer “un Plan de Manejo donde se podrá analizar si un puente puede o no afectar los valores que hicieron posible la designación del área protegida como tal”.

ABRAZO SURFERO

Para exponer su propuesta y dejar en claro esa “consternación” por el plan gubernamental, los vecinos y deportistas que usufructúan la Laguna de Garzón, organizaron una movida para este próximo sábado 18. El “abrazo surfero a las balsas” propone hacer un círculo con tablas, canoas o cualquier otro elemento que flote, en torno a las dos balsas que habitualmente cruzan la laguna, indicó Zumarán.

La promotora de la iniciativa es Laura Moñino, propietaria de la escuela de wind-surf y kite-surf que opera sobre la laguna Garzón. También los deportistas creen que construir un puente en esa privilegiada zona natural es una falta de respeto al medio ambiente y a los estudios que desaconsejan una obra de esa magnitud.

Por el contrario, también ellos entienden que debería continuar el sistema de balsas actual –teniendo en cuenta la propuesta de algún empresario que prevé mejorar los mecanismos de funcionamiento- y con un horario ampliado, similar a los autorizados por el MTOP en otros puntos del país donde también se sirven de este instrumento para cruzar ríos.

Y por si no bastaran los citados argumentos para “el abrazo” del sábado, la organización está anunciando que sorteará un viaje a El Salvador (uno de los destinos top del mundo para los sufristas) entre los participantes.

VIÑOLY: ANTES NO PERO AHORA SÍ

Hace menos de un año el arquitecto Rafael Viñoly, quien según el gobierno diseñará el nuevo proyecto de puente en Garzón, era un férreo opositor a esa iniciativa. En una carta pública enviada al semanario Búsqueda a fines de julio, Viñoly había declarado su rechazo a la construcción del puente sobre la Laguna Garzón y los riesgos del boom inmobiliario en la zona costera.

“Para entender las razones por las cuales la extensión de la ruta 10 hacia el este de la costa uruguaya es un error de enormes consecuencias ecológicas, económicas y culturales, no hace falta más que visitar los desarrollos costeros en otras partes del mundo (los originales y sus peores imitaciones más recientes) que han seguido una estrategia de planeamiento guiada por la mera especulación inmobiliaria, sin una visión del futuro global del territorio nacional”, escribió entonces.

(foto: Kitesurf Garzón)
(para acceder a la resolución de los vecinos de José Ignacio y Garzón: