El desalojo judicial de una familia acusada de usurpar una vivienda de interés social y robar los muebles provocó, este viernes, una manifestación vecinal en Cerro Pelado. La mujer de la casa admite que la ocupó hace un año de forma ilegal pero exige una solución a la Intendencia, que no aparece dispuesta a dar marcha atrás con su plan de regularizar el barrio.
El grupo comandado por el dirigente barrial Roberto Verde quemó cubiertas y una bandera del Frente Amplio, además de llevar pancartas con consignas contra el gobierno y los desalojos iniciados tiempo atrás por la Intendencia de Maldonado. La movilización se activó cuando la policía llegó a desalojar a una vecina que, según contó ella misma a FM Gente, hace un año ocupó una vivienda de interés social que “encontró vacía”.
Dijo que llegó de Rivera a Maldonado en 1998 y que esperó por años a que le adjudicaran una vivienda, llegando a quedar como primera suplente en uno de los sorteos sin que jamás la llamaran. Afirmó que ni ella ni su marido tenían trabajo y les habían dado el desalojo en otra vivienda que alquilaban por 10 mil pesos, por lo cual hace un año salió a buscar una vivienda para ocupar.
“Me encontré en una situación difícil, la encontré abierta, estaba vacía y me metí para adentro. Ahora quieren que entregue las llaves porque si no me llevan detenidas. Yo no maté a nadie, mi delito fue ocupar una vivienda de la Intendencia”, comentó la mujer a FM Gente, a quien la jueza advirtió que si no se iba la enviaba directo a la cárcel de Las Rosas.
“No tengo trabajo, no tengo plata, no tengo como alquilar. No tengo nada, estoy en la miseria total”, sostuvo la mujer, que dijo tener dos hijos aunque deslizó que solo uno vive con ella. No hizo mención a la situación laboral actual de su marido, pero poco después Roberto Verde comentó en rueda de prensa que el hombre tiene trabajo.
Tanto Verde como la mujer desalojada afirmaron que, si bien cuentan con los servicios del abogado Pablo Piacenti, no tuvieron derecho a defenderse en la denuncia de la intendencia por usurpación y juicio de desalojo. Tampoco hubo respuesta desde el área de Vivienda de la intendencia donde, según la desalojada, la directora Marilín Moreira la conminó a entregar la casa y le ratificó que no tiene derecho a recibir una.
La mujer afirma, asimismo, que la denunciaron por robar los muebles de la vivienda que ocupó y también por atacar a los policías que han intervenido en el caso. Ella insiste en que la casa estaba vacía cuando llegó y afirma que jamás tuvo un altercado con efectivos policiales. “Me citaron varias veces, pasaba más en la comisaría que en casa. Y nunca me rehusé cuando me llamaron, a veces a las ocho y media de la noche. Nunca robé nada porque no había nada en esa casa”, aseguró.
La desalojada insistió en que no tiene a donde ir, porque está sin trabajo y no cuenta con parientes que puedan auxiliarla en este departamento. “La jueza me dijo que no había plazo, que no había marcha atrás. Sé que está mal ocupar, ¿pero quién de Cerro Pelado ha ido a Las Rosas por ocupar una casa? ¿Por qué yo?”, cuestionó.
En defensa de su vecina, Verde acusó a la intendencia de haber iniciado los desalojos para adjudicar viviendas a “los amigos del gobierno” o dejar a los ocupantes “según la cara”. Particularmente, responsabilizó de esto al director general de Integración y Desarrollo Social, Fernando Franco y a la directora de Vivienda, Marilín Moreira.
Verde vociferó que “la justicia se está pasando de viva y de rosca” y que este gobierno “no es socialista como dice”. “A los sirios les dieron casa y les van a enseñar idiomas, pero a los hijos del pueblo los mandan a la calle”, fustigó.
(foto: FM Gente)