La justicia de San Carlos envió a la cárcel, este viernes, al sujeto de iniciales M.M, por un delito de suministro de estupefacientes. Este hombre tenía una boca de drogas en un asentamiento ubicado en la Ruta 39 casi la 9. LOos efectivos policiales procedieron a realizar un allanamiento en su casa y el hombre huyó, abandonando una balanza y 32 gramos de cocaína en su máxima pureza.
Minutos más tarde fue detenido y llevado ante la justicia.
Esos 32 gramos pasaban a ser al menos 90, después de ser estirada sumándole otros elementos como aspirinas molidas, harina o cualquier otro producto de similares características.
Cada gramo de cocaína estirada ronda un valor de 200 pesos.