El caso del copamiento en Maldonado Park tuvo un giro inesperado en las últimas horas, ya que la pareja del dueño de la casa y denunciante de la situación resultó ser cómplice del copamiento y fue quien lo "entregó" a los asaltantes argentinos. Este lunes fue enviada a la cárcel como medida cautelar. Según fuentes policiales, llevaban aproximadamente siete años juntos y tenían un hijo en común.
La jueza Sylvana García Noroya formalizó en horas de la tarde de este lunes a la mujer de iniciales M.O.U.C, de 36 años, por la presunta comisión de un delito de copamiento en calidad de coautora. Deberá cumplir prisión preventiva por 120 días.
Fuentes policiales dijeron a FM GENTE que la pareja llevaba aproximadamente siete años juntos y que tenían un hijo en común. En las pericias al celular de ella encontraron un contacto con un hombre argentino, que no viajó a Uruguay pero era quien recibía información de cuánto dinero había en la casa y dónde estaba ubicada, por ejemplo.
Asimismo la Policía está investigando si M.O.U.C también está involucrada en un robo dudoso que la misma familia sufrió en el mes de enero.
Este domingo ya se había dispuesto la formalización de la investigación de dos argentinos de 18 y 32 años, vea la nota anterior.
El copamiento ocurrió a las 3 de madrugada del sábado en una vivienda ubicada en la calle Horneros. En la misma se encontraban el propietario, su pareja, sus dos hijos menores de edad y su madre.
La víctima declaró que tres hombres ingresaron a su vivienda por la puerta del frente que se encontraba sin tranca y mediante amenazas con una cuchilla lo redujeron a él y a su pareja y los ataron con un cable.
Los hombres le colocaron un teléfono a la víctima para que se comunicara con una cuarta persona la cual le exigía mediante amenazas que colaborara con los copadores.
El dueño de casa entregó todo lo que tenía de valor en ese momento, tarjetas de crédito con un saldo de 90 mil pesos, 15.000 pesos en efectivo, 2.500 dólares, dos celulares y la llave de un auto VW. Tras varias horas de permanecer atados, pudieron liberarse y llamar a la Policía. El resto de la familia, que dormían, no se percataron de los hechos.
Recién a las 7 de la mañana pudieron zafar de sus ataduras y dar cuenta a la policía. A partir de allí realizó un excelente trabajo que permitió rastrear a los copadores hasta huyeron en un ómnibus del servicio interdepartamental hacia Montevideo y desde allí a Colonia. Cuando pretendieron dejar el país a través de Buquebus, fueron detenidos dos ellos por personal de la prefectura de Colonia y luego traídos a Maldonado, con el resultado informado líneas arriba.