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Waldemir Graña se refirió en la Contratapa de la Revista de FM GENTE al nuevo decreto que comenzará a regir el próximo 1º de setiembre en el Ministerio del Interior.

Dicha normativa, establece que los funcionarios policiales percibirán un subsidio equivalente al 75% de su salario, a partir del décimo día de inasistencia en el año, de forma alterada o consecutiva por causa médica, hasta su reintegro a la actividad.

Sin embargo, Graña denunció que la tarea policial genera más riesgos en la salud de los funcionarios que cualquier otra profesión.

“Diariamente están tratando con diferentes situaciones que pueden poner en riesgo su salud (…) hasta las propias situaciones climáticas que enfrenta el funcionario ejecutivo en la vía pública”.

Por otra parte, estimó que el decreto surge por la mala utilización que realizan los funcionarios públicos de las certificaciones médicas. “No pueden pagar justos por pecadores”.

“La administración debería haber puesto todo el organismo del Estado para controlar a los funcionarios desleales”.

En esa misma línea, sugirió que de ser necesario, se debería controlar “varias veces en el día” a los funcionarios que presentan una certificación médica, y de no ubicarlos en su domicilio, tomar las medidas disciplinarias correspondientes.

“Estamos obligando al personal policial a tener que concurrir a trabajar enfermo para no perder salario”, concluyó.